Nombre: Tempranillo

Otros nombres conocidos: Cencibel, Sensibel, Cencibera, Tempranilla, Tinta del país, Tinto fino, Tinto aragonéz, Tinta corriente, Tinto de Rioja, Tinto país, Tinto de la Ribera, Tinto Madrid, Tinto riojano, Tempranillo de la Rioja, Tinta de Toro, Tinta serrana, Tinta Santiago, Tinta Montereiro, Tinta Monteiro (a), Tinta Roriz, Grenache de Logroño, Ull de Llebre (Ojo de liebre), Olho de lebre, Jacivera, Morisca, Palomino negro, vid de Aranda, Arganda, Tinto Aragón, Aragón, Aragonés da ferra, Aragonez de Elvas, Aragonez, Aragonés, Chinchiyano, Chinchillano (a), Araúxa, Garnacho foño, Arganda, Arinto tinto, Valdepeñas, Negra de mes, Garnacho fono, Chinchillana, Escobera, Verdiell.

Cepa(s) de origen o mutación: Benedicto y Albillo mayor (Turruntés de La Rioja)

Lugar de origen: La Rioja-España

Lugar de origen histórico: Valle del Ebro-España

Uva tinta que encontramos en diversos continentes, pero, su mayor representante es España (Se siembra más tempranillo que Cabernet sauvignon, Merlot y Syrah juntas y está en casi todo el país), particularmente La Rioja, símbolo claro de esta Denominación de Origen. También posee una presencia importante en Portugal o países como Australia, la veremos en California, México, Argentina, Chile, Perú y en Uruguay en menor medida, Al norte de África como en Marruecos o al sur en Sudáfrica, volviendo a Europa, la tenemos al sur oeste de Francia, algo por el Nor oeste de Italia y en la isla de Sicilia por el sur.

La tempranillo es una variedad que, como su nombre lo dice (de temprano), posee una maduración natural mas bien precoz, es de “fácil” control, haciéndola una de las favoritas de los viticultores, tiene una personalidad propia desde los vinos jóvenes hasta los de larga crianza, es netamente fiable, con importante peso frutal en el vino (zarzamoras, grosellas negras, frambuesas, frutilla,…), untuosa en boca, y con un carácter idóneo para la crianza, aunque es ligeramente tánica y de acidez suave. Es perfecta para ensamblar con otras variedades más aromáticas, el roble nuevo es un traje a medida para la variedad.

Esta variedad no refleja claramente su “terroir” como otras, pero es muy polivalente para su cultivo, mantenimiento y elaboración de vinos. Cuenta con un pantonne muy amplio para el maridaje, claro está que la comida regional española es su mejor compañera, aguantado su gran variedad gastronómica, desde sus embutidos, quesos, guisos y asados, arroces, platos de caza y ni que decir de las viandas relacionadas a la micología, también la podemos encontrar en vinos de todos los calibres, desde jóvenes, maceración carbónica o pelicular, vinos rancios, crianza corta, mediana y larga, monovarietales y diversos ensamblajes, hasta en vinos dulces. España se viene sumando paulatinamente a la demanda mundial de vinos con crianzas más cortas y con esta variedad obtiene grandes resultados, ya que, como se ha mencionado, el roble nuevo le sienta como un guante, así, se obtienen vinos frescos, bien estructurados y frutales con crianzas de poco tiempo, incluso en su Denominación de Origen cuna, como es La Rioja, donde son más típicas las crianzas más prolongadas y de corte más clásico.

A orillas del río Duero en España, tiene un peso importante en la producción de vinos, donde encontraremos grandes representantes, no solo de la variedad, sino también del País como por ejemplo los vinos de Dominio de Pingus o Bodegas Vega Sicilia, solo por mencionar productores de nivel “World Class”, pero, existen cientos de ejemplos de lo que se puede obtener con esta vid si es bien tratada, con representantes extraordinarios en cuanto a una relación calidad precio sin comparación a nivel mundial.