Para entender de pimientos y picantes, es importante saber algunas cosas. Primero, existe una sustancia que se llama Capsaicina, que es un componente químico que está en los aceites de las semillas y “costillas” o “venas” de los pimientos, chiles, ajíes, guindillas o picantes, o como quiera llamarles. Todas ellos, frutas del género Capsicum, de la familia de las Solanáceas, donde también están incluidos los tomates, las patatas y las berenjenas. Es gracias a la Capsaicina, que estimulan las membranas mucosas, las terminaciones nerviosas de la lengua y los sensores térmicos de la piel y produce una reacción química que nos hace producir la llamada “sustancia P” en la sangre y manda señales al cerebro que dicen que estamos comiendo algo picante…