“C-nueve, H-dieciseis, O-dos” es la formula química de la whisky-lactona. Pero la madera le aporta sabor y por tanto su estructura con el aporte del roble es “3-metil-4 octanol; 5-butil-4-metil-dihidro-2(3H) furano”. En cualquier reunión de amigos quedará como un experto diciendo que la molécula del whisky se resume en “4-hidroxi-3 metiloctano ácido gama-lactona” y su peso molecular; 156,23. Las lactonas son éteres internos de ácidos hidróxidos y son tan aromáticos, que solo el olor del almizcle se le aproxima. Esto quiere decir que a vista de microscopio, cada whisky tiene una imagen distinta que lo identifica como único, como si de “ADN” estuviésemos hablando y que van cambiando incluso cuando le añadimos hielo o agua, solo esperemos que la ciencia no influya tanto en el mundo del whisky, y que no hayan modificaciones como las que están empleando en otros campos.
Distintos whiskies vistos a travez del microscopio: