El Quiche Lorraine tiene su origen en Francia, en la región de Lorena, al noreste del país galo, en su capital, Nancy, aparece por primera vez, por el año 1600 y la deformación de su vocablo en origen, del dialecto lorenés Küchen al alemán Kuchen que quiere decir pastel, da origen a esta clásica receta de la gastronomía, que tiene tantas recetas como cocineros, ya que sus variantes son infinitas y no es más que eso, un pastel salado, aunque algunos creen que se inventó en Alemania, todos coinciden…
Quesos extremos
La palabra queso proviene del latín caseus, pero en la época de los romanos, los legionarios, usaban el termino formaticum del caseus formatus (queso moldeado) y por eso en idiomas como el francés se dice fromage y en italiano formaggio.
A continuación les mostraremos un Top 5 de quesos bizarros o extremos que podemos encontrar a la venta, ya sea por su origen, precio, modo de producción u otra particularidad que los hace únicos o especiales. Sin lugar a duda, las leches más consumidas para la producción de quesos a nivel mundial son las de vaca (cheddar, gorgonzola, brie de moaux), cabra (Feta, Halloumi), y oveja (pecorino, manchego, roquefort)…
Sopa de cebolla
Clásica y sencilla, la Soupe à l’oignon, es de esas recetas con casta de la comida francesa, fina y reconstituyente, algo más que una simple sopa, en la época de los romanos ya era popular y era reconocida como comida de pobres, por que las cebollas crecían rapidamente, eran baratas y por su sencillez. Hace unos seis siglos, fue retomada por la cocina francesa y hoy en día tiene una que otra variación, pero no por eso deja de ser un excelente plato, muy reconfortante en invierno, si ya lo decía Alejandro Dumas, esta sopa era muy querida de los cazadores y venerada por los borrachos…
Triple Chessecake
Se puede usar solo queso Ricotta, o cualquier queso cremoso que se desee, lo más fácil sería usar un queso Philadelphia, pero tendrá mucho menos sabor, lo ideal es que hagas tu propia mezcla de quesos para ir variando la receta según tu gustos, puedes darle mayor carácter incluso haciéndolo con requesón o queso de cabra mezclado con queso crema. Acompañala haciendo tu propia mermelada, disuelve 150 gramos de azúcar en 300 gramos de frutos rojos, frescos o congelados a fuego bajo durante poco más de media hora y bordarás la perfección…