Una salsa clásica donde las haya, la salsa americana del francés sauce à l’américaine , creada allá por el año 1870, donde es discutido su creador, aunque sí se coincide que se creó en Francia a pesar del nombre. Sirve como salsa tal cual, o como base para la preparación de otras salsas o platos. Está compuesta básicamente por caldo de marisco o pescado, cabezas y cáscaras de crustáceos, coñac, tomates, cebollas, ajos, vino blanco…, posee un fino y elegante sabor a mar, usando esta finura para acompañar platos a base de mariscos, pescados, arroces o pastas que lleven lo anterior y queramos darle untuosidad y un fino toque a mar, como unos canelones de marisco, o lasaña de langostinos…