En ocasiones como clientes que somos todos, en un restaurante se nos antoja pedir algún plato sin algún ingrediente en concreto, bien sea por que no es de nuestro agrado o podríamos ser alérgicos a él o simplemente no estamos de humor para aguantarlo en ese preciso momento, también puede suceder lo contrario y es que queremos añadir un ingrediente a una receta que habitualmente no lleva o no lo ponen en ese sitio al que vamos a comer, por poner unos ejemplos… ¿Podría taerme la hamburguesa completa pero sin cebolla? Quisiera que le añada un huevo frito a mi filete por favor. Yo quiero unos macarrones pero sin queso que soy alérgico! hasta ahí todo parece, vamos a decir que normal, pero cuando somos realmente caprichosos, nos inventamos alergias o simplemente tenemos el día con ganas de ver sufrir al resto podemos convertirnos en personas realmente repudiables, nunca mejor dicho, para darnos de comer aparte, demostrando incluso que la estupidez humana no conoce límites, ah ¿qué? ¿No me crees? A continuación te presento ordenes literales que fueron tomadas a…