Hace un par de semanas te contamos ¿Qué es el Gomasio? y hoy te contamos como hacerlo. Para hacer el Gomasio (sal de sésamo) el sustituto perfecto de la sal debemos saber que en realidad no es un sustituto de la sal en sí ya que este contiene sal, nos referimos al gomasio como sustituto de sal en cuanto al cambiar el hábito de cambiar gomasio por sal, nuestro consumo de la misma lo reducimos drásticamente, muy válido para quiénes necesitan reducir el consumo del mineral.
Además de conocer los beneficios de reducir el consumo de sal, por ejemplo, con esta mezcla, el ratio que usaremos será de 15 partes de sésamo por una de sal sin refinar, es decir, sal marina y sabiendo los aportes de las semillas de sésamo (ajonjolí) como sus poderes reconstituyentes, su aporte en grasa insaturadas, zinc, hierro, calcio y proteínas solo por nombrar unos pocos, existen estudios que dicen que el sésamo aporta 6 veces más calcio que la leche y 5 veces más hierro que la carne. La manera tradicional de hacer el gomasio es moliéndolo a mano con un mortero japonés conocido como suribachi, pero, como nosotros no lo tenemos, puedes hacerlo en un mortero normal o más rápido si lo haces en un molinillo de granos de café, como lo haremos nosotros.
Los ratios de sésamo y sal más usados para esta receta pueden ser de 7/½, 10/1, 15/1 o 20/1, elige la que prefieras, sobre todo esto te ayudará si eres hipertenso o el médico te regula a la baja el consumo de sal.
Ya sabes que los usos de esta “sal” de sésamo tostado son infinitos, ensaladas, verduras, arroces, carnes, pescados, pastas… Guárdalo en un envase hermético y bien seco para que te dure, es mejor hacer pequeñas cantidades repetidas veces para que siempre tengas todo su aroma y sabor, total, con lo fácil que es de hacer y el poco tiempo que toma hacerlo, tampoco es mayor problema, ¿Verdad?
Para una mayor intensidad de sabor, nosotros no solo vamos a tostar las semillas de sésamo, sino también la sal, para ello, puedes usar sal marina, sal de roca, sal gris o flor de sal que vas a tostar hasta que empiece a tomar un color grisáceo. No te pases al tostar el sésamo que si no puedes estropear la receta. Úsala en tus nigiri, onigiri, suhsi, sekihan, Yakitori, Yakimeshi u otros platos japoneses o recetas orientales que usen salsa de soja, que ya es salada y no te atreviste a echarle sal para no pasarte, pues el gomasio es ideal para esas recetas ya que su aporte de sal es mínimo y el sabor a frutos secos del sésamo le aportan mucha complejidad. Vamos con el vicio.
RECETA Nº 487 – GOMASIO (SAL DE SÉSAMO)
- Raciones: 100 gramos aproximadamente
- Dificultad: Baja
- Preparación: 2 minutos
- Tiempo de cocción: 20 minutos
- Coste: Bajo
- Tipo: Salsas Y Especias
- Familia: Especias
- Sub Familia: Mezcla
- Cocción: Sartén
INGREDIENTES
- 15 cc semillas de sésamo blanco
- 1 cc escamas de sal o puedes usar otra sal sin refinar, de roca, marina gorda, sal gris…
PREPARACIÓN
1. Ponemos una sartén a fuego medio y empezamos a tostar las semillas de sésamo moviendo constantemente hasta que cambien de color a un marrón tostado o hasta que empiecen a crepitar, así sabremos cuándo están listas, ten paciencia, esto puede llevarte al menos unos 10-12 minutos, la idea al hacer esto es deshidratar las semillas. Retiramos del fuego y separamos 2 cucharaditas para el final. A mi particularmente, me gusta bien tostado, más aromas y sabor.
2. Ahora es el turno de hacer lo mismo con la sal y la tostamos hasta que empiece a coger un suave tono grisáceo, esto puedes hacerlo a mayor temperatura para ir más rápido.
3. Es el momento de triturar, mezcla las semillas y la sal y en mortero, batidor o molinillo de café, pero hazlo de a pocos o a baja velocidad o por “golpes”, queremos romper el sésamo y moler la sal, de lo contrario el sésamo puede soltar sus aceites y estropearnos la mezcla. Tampoco lo hagas polvo, trocito pequeños del sésamo nos indicará que es suficiente. La textura tiene que parece arena de playa gruesa.
4. Añadimos las semillas que habíamos separado para tener algunas enteras, mezclamos bien, dejamos que enfríe y guardamos en un bote con tapa y conserva en un lugar seco, nunca en el frigorífico. Bien guardado puede durarte unos 4 o 6 meses A disfrutarlo!
NOTAS
Para esta receta, y según gustos, puedes usar semillas de sésamo negras, pero lo más habitual es hacerlo con las semillas blancas, también puede usar una mezcla de ambas. Ahora bien, si le añades unas hojas de alga nori tostada al moler, estarás haciendo furikake, una simple variante del gomasio usado para rociar sobre el gohan, o sea, el arroz blanco cocido de forma tradicional, además de rociarlo sobre sopas, guisos, fideos, pescados y lo que se les ocurra. En ocasiones al furikake también se le añade alga wakame tostada o katsuobushi, las hojuelas de bonito deshidratado.
Haz tu propia versión, ¿Por qué no? añade las especias o hierbas de tu preferencia y tunéate tu propio gamosio o furikake y crea una versión nueva, hey! no dejes de añadirle Shichimi togarashi para una versión picante y súper power! Recuerda que también puedes hacer tu ratio favorito de sal y sésamo, esto ya depende de tu gusto o de tus limitaciones para el consumo de sal, ¿No es maravilloso? Todo depende de ti.